La trampa del pago mínimo

¡Hola a todos/as! ¿Cómo andan?

Hace un par de meses tuve una charla con un amigo sobre las tasas de interés que estaban cobrando los bancos al momento de financiarse, él tenia la costumbre de usar mucho la tarjeta de crédito para todas las compras que hacía diariamente: comida, nafta, gastos de ocio, ropa, boleta de luz, gas, agua, etc. Todo lo que pudiera pagar con tarjeta de crédito, lo hacía con este medio de pago.

Hasta este punto podríamos decir que no hay una conducta “negativa” respecto al uso del dinero, el problema aparece cuando me cuenta que todos los meses (o casi todos) pagaba el mínimo de la tarjeta de crédito y el resto del pago lo financiaba. Lo peor de todo es que se dio cuenta lo mucho que le estaban cobrando de intereses recién cuando las tasas volaron a causa de la corrida bancaria que tuvimos en 2018.

Usar el pago mínimo de la tarjeta de crédito es quizás la mayor tentación que nos ofrece el banco para financiarnos y que, al mismo tiempo, nos pone en una situación más complicada financieramente hablando. Cuando usamos la opción de pagar el mínimo de la tarjeta de crédito lo que estamos haciendo es financiarnos dos veces.

Pensémoslo de esta manera, cuando usamos la tarjeta de crédito lo que estamos haciendo es diferir en el tiempo el pago de algo que estamos consumiendo hoy: comprar un televisor, computadora, pagar la nafta, pagar un servicio, etc. Por lo tanto, en el momento que estamos pasando el plástico por el posnet, automáticamente nos estamos comprometiendo con el banco o entidad emisora de esa tarjeta que en el próximo mes le vamos a pagar lo que estamos gastando hoy.

Si a éso le sumamos que al momento de pagar hacemos un pago mínimo del monto total adeudado, nos deja como resultado un doble financiamiento.

El claro ganador de esta situación: el banco, el cual nos va a cobrar intereses por este movimiento. Si después no podemos pagar, nos va a cobrar punitorios por los días que nos atrasamos en los pagos pendientes.

A primera vista cuando realizamos el pago mínimo podemos llegar a sentir un “alivio” porque pagamos muy poco en relación de lo que deberíamos haber pagado, pero al mes siguiente se nos suma al total de nuestros próximos consumos la cuota de los consumos anteriores que nos financiamos.

Veamos un ejemplo real:

En mi resumen de la tarjeta Visa tengo que realizar un pago por $12000 pesos, el pago mínimo que me ofrece el banco es de $530 pesos y las opciones de financiamiento son: 3 cuotas de $4115, 6 cuotas de $2187.95, 12 cuotas de $1239.74 y 24 cuotas de $ 781.50. Supongamos que pago el mínimo y uso la opción de 3 cuotas de $4155, al siguiente mes (suponiendo que me llegara para pagar nuevamente $12000 pesos) tendría que pagar $12000 de consumos del mes en curso, mas los $4115 anteriores, es decir $16115 en total. Si siguiéramos utilizando el mismo mecanismo, esto se volvería una bola de nieve hasta que no pudiéramos pagar ni el mínimo que nos ofrecen.

En resumen y como conclusión, eviten pagar el mínimo de la tarjeta. En el peor de los escenarios, si no llegan a pagar el total de lo que adeudan, es preferible que hagan un pago parcial y el resto lo paguen el mes siguiente. Si esta opción tampoco es viable, evalúen qué tasa es más baja, si la del pago mínimo o un préstamo personal para poder liquidar la deuda de tarjeta de crédito y si utilizan esta última opción dejen de usar las tarjetas hasta que las cuentas queden saldadas.

 

Espero que les sea útil y para cualquier consulta que tengan pueden enviarla a nuestra casilla de mail.

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Les dejo un fuerte abrazo y un especial saludo a mi amigo Matias Pastorini!

 
 

Gonzalo Pagura

Ceo&Founder